La capital británica abrió sus primeras líneas de metro en 1863. En la época se pensaba que la construcción de la línea de metro "Metropolitan Line", serviría para enfadar al diablo, ya que pasaba por el subsuelo, cercano al infierno. Finalmente se llegó a construir sin que muchos estuviesen de acuerdo. Desde aquel momento, los espíritus, las apariciones y las leyendas urbanas han alimentado la llama de los misterios que rodean al transporte subterráneo más antiguo del mundo.
Aquí os presentamos una lista de los fantasmas, apariciones y leyendas más famosas del metro de Londres...
"MIND THE GAP"
COVENT GARDEN STATION
La estación de
Covent Garden es una de las pocas estaciones de metro del centro de
Londres que no tiene escaleras mecánicas. A la plataforma se accede por una
escalera de 195 escalones. Esta estación se encuentra en la línea Piccadilly
entre Leicester Square y Holborn.
Nacido el 20 de
febrero 1847 William Charles James Lewin subió al escenario en 1867 bajo el
nombre artístico de William Terriss. Rápidamente se estableció como un actor
muy popular en el Londres victoriano haciendo papeles de héroe con capa y
espada. Debido a eso pronto se ganó el apodo “Breezy Bill”.
El 16 de
diciembre 1897 se encontraba a las puertas de entrada del Teatro Adelphi
en Strand para ensayar la obra en la que iba a actuar, "Secret
Service". Fue asesinado a puñaladas por un actor descontento y envidioso
de su fama. Mientras agonizaba en los brazos de sus compañeros susurró:
"Volveré".
Un empleado del
metro de Londres vio su fantasma en la estación de Covent Garden en 1955.
Bastante asustado, el hombre lo identificó cuando le enseñaron una
fotografía del actor que fue tomada en su apogeo. Él lo describió como un alto
y distinguido caballero que llevaba un traje gris anticuado y guantes de
color claro.
Además de
frecuentar la estación de Covent Garden, ya que justo esta se encuentra
emplazada bajo el sitio donde se hallaba por aquel entonces una panadería que
visitaba con frecuencia en vida, se dice que Breezy Bill también vaga por el
Teatro Liceo, que está justo al lado del Strand y, posiblemente también, el
Teatro Adelphi donde el personal que trabajaba en el teatro en la década de
1950 fue testigo una aparición similar a la observada en la estación de Covent
Garden en 1955. Ellos llamaron a su visitante fantasmal "Charlie".
El último avistamiento
reportado del fantasma de Breezy Bill fue en la estación de Covent Garden en
1972, aunque los miembros del personal han seguido escuchando durante años
ruidos extraños, susurros y pasos fantasmales en las plataformas cuando nadie
estaba allí.
ELEPHANT & CASTLE STATION

El personal de mantenimiento y limpieza que trabaja en la estación por la noche suele escuchar el sonido de alguien corriendo por el andén desierto. El corredor fantasma se ha escuchado en numerosas ocasiones, pero nunca se ha visto. Además, se escuchan extraños sonidos de pisadas en la plataforma y las puertas de la estación se suelen abrir sin razón aparente.
En 1986 un joven se encontraba esperando el metro a primera hora de la mañana cuando vio a un corredor con ropas deportivas haciendo estiramientos y corriendo por el andén. El joven no le dio demasiada importancia aunque se extrañó del comportamiento del deportista a esas horas de la mañana haciendo ejercicio en el andén. Una vez que el transporte llegó a su destino y el joven se subió a uno de los vagones, vio como la figura del corredor iba desapareciendo en una neblina fantasmal hasta quedar transparente.
BETHNAL GREEN STATION
Cuando Gran
Bretaña declaró la guerra a Alemania en septiembre de 1939 la estación de
Bethnal Green (en la línea Circle), era una de las pocas estaciones del extremo
este de Londres con un nivel de profundidad suficiente para ser un gran refugio
antiaéreo público. Situado en una zona urbana densamente poblada, el refugio
contenía 5.000 literas y a veces albergaba hasta 7.000 personas. Es
especialmente trágico que la estación que había salvado tantas vidas en
el apogeo de la guerra (septiembre 1940-mayo 1941) se convirtió en el sitio del
peor desastre civil de Gran Bretaña de la época.

Entre las
20:17 y 20:27 más de 1.500 personas se hacinaban en la escalera solitaria
de la estación. Estaba lloviendo fuera así que el suelo estaba húmedo y
resbaladizo. La escalera no tenía pasamanos central y la única iluminación era
una solitaria bombilla de 25 vatios.
A las 20:27 una
explosión aterradora se escuchó en la estación. Los ingleses habían instalado
en un parque cercano 60 cohetes experimentales que dispararon a modo de salva.
El ruido de la explosión fue tan fuerte y tan poco familiar para los residentes
locales que empezó a cundir el pánico creyendo que una bomba alemana había
estallado cerca, por lo que todos pensaron en seguir descendiendo al subsuelo
por la hacinada escalera.
Un tumulto de
gente se lanzó hacia abajo precipitadamente y comenzaron a presionar por las
escaleras resbaladizas a todos los que allí estaban. Una mujer que llevaba un
bebé en brazos tropezó y se cayó mientras se acercaba a la parte inferior. Un
hombre que estaba justo detrás de ella cayó sobre la mujer y se produjo
un efecto dominó cayendo unos encima de otros. En menos de 20 segundos, cientos
de personas se encontraban siendo aplastadas en la estrecha y mal iluminada
escalera. Cientos de personas seguían bajando completamente ignorantes de la
tragedia que se estaba desarrollando literalmente bajo sus pies.
173 personas (27
hombres, 84 mujeres y 62 niños) murieron de asfixia en la escalera de la
estación de Bethnal Green aquella terrible noche. El horror y la magnitud de la
tragedia dejó una huella indeleble en el tejido mismo de la estación.
En 1981 el
supervisor de la estación se encontraba revisando las instalaciones antes de
cerrarlas hasta el día siguiente. El último tren había pasado hacía una hora y
todo el personal se había marchado a sus casas. Una vez asegurada la estación y
apagado algunas de las luces regresó a su oficina para ponerse al día con el
papeleo. Comenzó a escuchar los llantos y sollozos de niños pequeños. Al
principio él no le dio importancia creyendo que vendrían del exterior, pero el
sonido del llanto creció constantemente más y más fuerte. Entonces empezó a
escuchar voces femeninas tremendamente asustadas, seguido de fuertes gritos
desgarradores y otros ruidos que no podía identificar. El supervisor dijo que
esta cacofonía sonaba como "una multitud en pánico" y se prolongó
durante unos 10 o 15 minutos. Salió de su oficina muy asustado y corrió hasta
la salida. Posteriormente él admitió que la experiencia había sido muy
aterradora y que era algo que iba a recordar por el resto de su vida.
EMBANKMENT STATION
Esta estación de
metro está en el centro de Londres, cerca de Trafalgar Square y de la calle
Fleet. Es una de las más concurridas estaciones de intercambio de la red entre
las líneas Bakerloo, Circle, District y North Line. Con los años, muchos de los
empleados de la estación y los contratistas han informado sensaciones muy
extrañas y experiencias inusuales en uno de los túneles en desuso de la
estación que pasa bajo el río Támesis. El túnel se conoce como “Pages walk”.

Los trabajadores
del metro afirman haber oído y visto como las puertas se abrían y cerraban de
forma inexplicable, además de sonidos extraños como chirridos de trenes
inexistentes, pasos o gritos.
También han
informado de la presencia de "puntos fríos" en la estación, zonas
donde solo se siente desazón y extraños escalofríos. Los trabajadores de
mantenimiento cuentan que la atmósfera en el interior del túnel es opresiva y
amenazante. Parece que todo el que entra en “Pages walk” por su propio
pie no vuelve a querer ir.
FARRINGDON STATION

HIGHGATE STATION

Sin embargo,
según los residentes locales, se sigue escuchando el sonido inquietante
de los trenes que pasan por la línea fantasma, ahora cubierta de maleza.
Incluso sobre los viejos andenes pueden verse espíritus de pasajeros esperando
el ferrocarril.